La diosa principal del templo de Karnak es Amón, una de las principales deidades de la antigua religión egipcia. El templo de Karnak, en Luxor, era el hogar de Amón y se consideraba uno de los templos más importantes del antiguo Egipto.
El papel de Amón en la religión egipcia era polifacético y cambió a lo largo de los tiempos. En sus inicios, Amón era un dios tranquilo y representaba el viento y el aire. Con el tiempo, su imagen evolucionó y Amón se convirtió en una deidad clave de la tríada divina conocida como Amón, Ra y Ptah, fusionándose con el dios del sol Ra y el dios de la tierra Ptah.
Amón también era considerado una deidad creadora y desempeñaba un papel inspirador para gobernantes y faraones. También era venerado como dios de la justicia y la protección, y se le rendía culto en gran parte de Egipto.
El templo de Karnak era un importante lugar de culto y súplica a Amón, y fue un importante centro de poder religioso y político en diferentes periodos de la historia del antiguo Egipto.